Actividades

Salto de Altura

Transcurridos apenas 2 años desde la creación del Club de Atletismo Tximista, Julián Arrate propuso a la comisión de fiestas tener un día sobre atletismo en la plaza, en las patronales fiestas de San Antolín.

Era 1991 y aquel año las barracas de las fiestas se trasladaron a la calle Atea. Sólo los chicos compitieron en salto de altura y fue el bermeano Mikel Lertxundi el que inscribió por primera vez su nombre en este campeonato, que posteriormente se ha convertido en uno de los mejores campeonatos a nivel local que se organizan en el Estado Español.

Al año siguiente también compitieron las chicas. Y cuando se pensaba que Lekeitio, como creador e impulsor, podía tener un concurso élite, se redujo el presupuesto a la comisión de fiestas; lo que provocó que no hubiera un campeonato de saltos de altura en 1993, un concurso que se puede organizar con la mitad del coste que tiene contratar un grupo musical.

Fueron tres largos años. Afortunadamente, en 1996 se reanudó la competición que tanto ansiaban los vecinos como el propio club deportivo. El nivel de los participantes ha ido subiendo cada año. Asimismo, se mantiene la filosofía del equipo de impulsar a los atletas locales. Atletas con nombre internacional han participado en diferentes eventos de este campeonato. Suele ser grande la presencia del público; y sus gritos y aplausos animan a los saltadores. Muchos de los saltadores prefieren competir en Lekeitio que en otro lugar donde les pagarían más.

La marca de 2 metros y 14 centímetros que tenía Alejandro Badolato fue superada en 2003 por Javier Bermejo, que estableció una marca de 2 metros y 15 centímetros.

La participación de atletas y campeones de España a nivel mundial empieza a ser habitual. Este año tuvimos en Lekeitio al campeón del mundo y todavía récord, el cubano Javier Sotomayor. Sin embargo, en la X edición se consiguió la mejor participación en toda la historia del campeonato: contamos entre nosotros con 4 atletas de nivel mundial para deleite de los miles de espectadores de la competición.
La clara apuesta del Ayuntamiento de Lekeitio y de la Diputación Foral de Bizkaia por el concurso, sin olvidar la extraordinaria colaboración de los patrocinadores habituales, hace posible que la prueba tenga un seguimiento asegurado y sirva de referencia a las pruebas populares que se celebran a nivel estatal.

Barrak
Altuera Jauzia